Si hay una máxima que se repite incansablemente y desde hace años en el mundo empresarial, es que éste está sujeto a un continuo cambio y evolución. Esto implica que lo que un día fue puntero e innovador, hoy puede que esté obsoleto que esté frenando el desarrollo de tu empresa.
En este sentido, la “resistencia al cambio” puede entenderse desde esta perspectiva: cuesta desprenderse de lo un día significó un avance importante y una ventaja competitiva efectiva. Esto es lo que lleva a muchas empresas mantener sus soluciones locales, en lugar de migrar a la nube.
Y si bien la migración a la nube es un proceso que requiere de una planificación y organización pertinentes, sus resultados demuestran por qué debería ser una prioridad para cualquier organización, otorgando varias ventajas y beneficios a tu planificación de recursos empresariales (ERP) o la gestión de relaciones con los clientes (CRM), así como destacando en 3 pilares básicos para una empresa competente hoy día:
- Crecimiento y productividad: Alrededor del 62% de las empresas que han migrado a la nube, afirman un incremento exponencial en la satisfacción de sus clientes.
- Personalización, escalabilidad y adaptabilidad: El 44% de las organizaciones cuya migración ha sido un éxito, informan que los servicios y herramientas de los que disponen en la nube les ha llevado a aumentar la velocidad de lanzamiento o implementación de sus productos.
- Protección y seguridad: En aquellas empresas en las que se ha efectuado la migración a la nube, se ha reportado una reducción del 60% en los incidentes de seguridad respecto a sus antiguas soluciones locales.
“Lo que tengo ya funciona”
Uno de los mayores frenos para tu empresa es la idea de que para qué cambiar o actualizar lo que ya tienes si hasta ahora ha funcionado bien. El problema con esta idea es que la actualidad empresarial ha demostrado que, si bien puede ser cierta, es solo cuestión de tiempo que deje de serlo.
Y es que este conformismo y este arraigo por lo familiar puede volverse un verdadero obstáculo para todo avance e innovación. No negaremos que las soluciones locales pueden seguir haciendo el trabajo que han hecho hasta ahora, sin embargo, también es un hecho que cada son más las empresas que aprovechan las ventajas competitivas que les da la migración a la nube en sus sistemas de ERP o CRM:
- Integraciones de datos
- Funcionalidad lista para usar
- Capacidades avanzadas de aprendizaje automático
- Análisis predictivo para optimizar los procesos heredados en tiempo real
- Gran ahorro de costes
Es por eso que, aunque tu solución local pueda seguir haciendo su labor por el momento, quizás en un tiempo no muy largo sea la que te deje en una posición desfavorable respecto a tu competencia.
“Mis necesidades son únicas”
También hay un gran número de empresas, sobre todo aquellas con soluciones locales que han sido objeto de varias personalizaciones, que tienen arraigada la creencia de que sus necesidades son únicas, y la migración a la nube no podrá responder a ellas de la mejor manera.
No obstante, esta afirmación es muchas veces producto de la incomprensión respecto a las capacidades que puede tener una solución en la nube. Y es que Microsoft dedica multitud de esfuerzos en que sus soluciones en cloud ofrezcan la adaptabilidad y flexibilidad necesarias para hacer frente a cualquier necesidad empresarial.
Con la agilidad y escalabilidad que te otorga la migración a la nube podrás prescindir, sin sacrificar funcionalidad, de estas personalizaciones que no solo conllevan gastos, infraestructuras y proyectos subyacentes, sino que, además, muchas veces son solo producto de necesidades específicas y puntuales.
“Las soluciones locales son más seguras”
Existe también la concepción de que una solución on-premise es más segura que una en la nube. Y durante un tiempo así fue, pero a día de hoy es casi imposible que los sistemas aislados de una empresa puedan hacer frente a la sofisticación de las amenazas modernas. Para empezar, hay que entender que, si el mundo empresarial ha evolucionado a una velocidad vertiginosa, el de la ciberdelincuencia también lo ha hecho, y muchas veces a mayor velocidad, encontrando grietas y debilidades en los sistemas internos de las organizaciones.
Es importante comprender que la seguridad de una solución local depende en última instancia de las políticas, el grado tecnológico, el software existente y el personal a cargo de los sistemas de TI. En el momento en el que uno de estos elementos está obsoleto o desactualizado, se abre una gran puerta de entrada para malwares y otras amenazas.
Por el contrario, los sistemas en la nube cuentas con un sinfín de programas que mantienen actualizados el cumplimento, la seguridad y la gobernanza de las soluciones de los clientes automáticamente; mientras que en la soluciones locales, esta labor se hace de manera manual y corresponde a un personal que, por su propia naturaleza, es más propenso al fallo.
Si todavía tiene dudas sobre si migrar o no a la nube, contacta con nosotros y te las resolveremos lo antes posible
